20 años al pie del cañón, siete discos y ya uno, al menos, que recordaremos como, casi, el definitivo. Quizá el máximo exponente del ADN de Ornament sea precisamente el tema que da nombre al disco, con unas sacudidas de techno cortante y secuencial que cuando vuelven a empezar, lo hace con cajas de ritmo añadidas y con un aumento de la frecuencia; más y más intensidad. Una forma de adentrarse en una angustiosa persecución sin escapatoria, acongojante, pero enormemente adictiva por esa sencillez de percusión desnuda sin adornos que describe todos los momentos de un disco que, ojalá, sea parecido a cómo va a sonar 2021. Fabuloso.
“Ornament” among the 51 best international albums of 2020 by Hipersónica
